top of page
  • Foto del escritorMario Alegre-Barrios

A escena un “Scrooge” boricua en “Otra Canción de Navidad”



A CASI 180 AÑOS de su publicación, “A Christmas Carol” —una de las obras más emblemáticas del inglés Charles Dickens— continúa teniendo una vigencia imperecedera, con una popularidad abonada con la llegada de cada época navideña desde la perspectiva regional de innumerables autores de aquellos lugares en el mundo donde esta tradición tiene arraigo.


Puerto Rico obviamente no es la excepción y el dramaturgo José Luis Ramos Escobar aporta su propia versión a través de la obra “Otra Canción de Navidad”, que entre este miércoles 7 de diciembre y el próximo domingo 11 sube a escena en una producción del legendario Teatro Repertorio del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico, precisamente en el no menos célebre escenario del Teatro de ese campus, con funciones para el público en general jueves y sábado a las 8 p.m. y el domingo a las 4 p.m.


El papel de “Don Teodoro de la Plata” —el “Scrooge” boricua— será interpretado por Braulio Castillo, quien estará acompañado en escena por Gerardo Ortiz, Wanda Sais y Marcos Carlos Cintrón, junto a un nutrido grupo de estudiantes y egresados del Departamento de Drama del campus riopedrense de la UPR. El diseño de escenografía es de Israel Franco Muller, la iluminación de Nicolás Luzzi y la dirección musical de Aidita Encarnación.


Para Braulio, la oportunidad de trabajar en este proyecto “es una bendición extraordinaria, no solo por la oportunidad de regresar al escenario del Teatro de la Universidad de Puerto Rico, sino también por la de trabajar con colegas muy queridos y jóvenes estudiantes del Departamento de Drama que vienen subiendo y aspirando a estar en el mundo profesional”.


—Esta invitación se me hizo ya hace más de dos años, pero vino la pandemia y se tuvo que posponer, y al año siguiente hubo una huelga y eso volvió a paralizar todo, hasta que ahora, finalmente podemos presentarla y estamos todos más que emocionados al tener la posibilidad de mostrar nuestro trabajo —explica—. Esta pieza es una versión libre del clásico de Dickens, hecha por el profesor José Luis Ramos Escobar que me parece muy buena y acertada, porque recoge muy bien el espíritu navideño atado a nuestra propia realidad, al Puerto Rico de hoy, que preserva su cultura, que cuida su musicalidad de esta época y tradiciones, con un propósito que no se centra en la fiesta y el jolgorio, sino en un sentido de hermandad, con una crítica al materialismo, a la avaricia, el egoísmo… en fin, a todo lo que no es realmente importante .


El actor añade que aunque ha leído la novela de Dickens, no ha visto representaciones histriónicas completas del personaje.


—No he querido condicionar mi proceso de construcción de este hombre y de lo que yo considero que es “Teodoro de la Plata” —ilustra—. Me he dejado llevar por mi instinto y por la dirección de Miguel Vando, que es extraordinaria. Me siento muy cómodo con lo que está saliendo en los ensayos y estoy seguro de que el público que nos honre con su presencia tendrá una experiencia sumamente agradable.


Respecto a la experiencia de compartir responsabilidades con colegas como Gerardo Ortiz y Wanda Sais, Braulio la califica como “un privilegio”, por la calidad histriónica y humana de ambos.


—Anoche estábamos reunidos en el ensayo y en un momento determinado, Miguel Vando nos preguntó quiénes habíamos trabajado antes en ese escenario —comenta—. Algunos levantaron las manos y él dijo, “mírense bien las caras y no olviden este momento, porque por este lugar han pasado grandes maestros, no solo de Puerto Rico, sino del mundo… ese teatro de la UPR es La Meca de la actuación puertorriqueña, en especial paras quienes nos hemos formado en el Departamento de Drama de la Universidad de Puerto Rico”. Y yo añado que pararse en este escenario es uno de los privilegios más grandes que cualquier artista puede tener. Aunque no me gradúe en la IUPI porque me fui a estudiar fuera, aquí di mis primeros pasos, de la mano de maestro de todos, el gran Dean Zayas.

Por su parte, Wanda Sais asevera que ser parte de esta producción lo asume “no solo como un placer enorme, sino también como un deber para con la institución que me brindo la enseñanza que ha hecho de mí lo que soy ahora”.


—Además de agradecer a mi alma mater por todo lo que me dio, se trata también de aportar a la formación de esos estudiantes actuales del Departamento de Drama que nos acompañan en escena —apunta—. Es una fusión muy chula y estimulante de egresados con jóvenes en formación. Este junte generacional me parece maravilloso y es la mejor manera de devolver a mi universidad y aportar a los jóvenes que empiezan a abrirse camino en el mundo de la actuación. Ojalá y proyectos como éste se sigan repitiendo y que cuenten conmigo.


Wanda señala que da vida a “Matilde”, la hermana de “Teodoro”.


—Aunque ella no tiene poder adquisitivo ni vive con lujos, mantiene el espíritu de la Navidad y se esmera en mantener viva la ilusión de compartir con la familia lo poco que se tiene, en una época que debe ser de fe y esperanza —apunta—. “Teodoro” es todo lo contrario, porque cree que la Navidad es solo una razón para gastar dinero, derrochar y no compartir con quienes menos tienen.


Wanda considera que aunque ese desapego a lo material se había olvidado en décadas recientes, los huracanes, los terremotos y la pandemia que nos han azotado durante el último lustro han hecho que la gente vuelva a apreciar justamente lo que representa —más que lo material— lo espiritual, la salud, el amor y la comprensión.


—Lo importante no son los lujos y comprar y comprar —señala—. Lo verdaderamente trascendental es sacar tiempo para estar con los seres que se ama y ese es el mensaje central que tiene esta obra. Sé que eso siempre se dice y parecería que lo sabemos, cuando la realidad es que lo olvidamos siempre.


Los boletos para público general están a la venta en prticket.com, los boletos para estudiantes universitarios en la oficina del Teatro UPR y los boletos escolares se consiguen llamando al (939) 429-4804. Para más información puede acceder la página de Facebook Teatro UPR.


Sinopsis


La historia comienza un día de Nochebuena, al amanecer, entre décimas, villancicos y melodías populares, los vecinos se van reuniendo en la plaza del pueblo. Todo es fiesta y algarabía hasta la llegada de Don Teodoro que se dirige a su negocio.


Mientras estaba en su tienda, el hombre recibió la visita del fantasma de Honorio, un antiguo cliente muerto un año atrás, que le previene que —por ser tan avaro—, le espera un destino terrible, pero también le advierte que tendrá una última oportunidad de cambiar. El fantasma de Honorio lleva a Don Teodoro a revivir su pasado, su infancia y juventud y le muestra cómo comenzó a cambiar su vida por su adicción por el trabajo y su desmedido afán por el dinero.


Aunque las vivencias —llenas de inocencia y melancolía—, comienzan a conmover al viejo, sus excusas y negativas de arrepentimiento obligan al fantasma a mostrarle la realidad del presente. Entonces enfrenta al avaro a la situación de la familia de su empleado, Roberto Escalera, quien a pesar de su extrema pobreza y de la enfermedad de su hijo Tomasito, celebra y da gracias junto a su familia. También le muestra cómo su propia prima, Matilde, celebra la Navidad a pesar de la escasez y festeja con familiares y amigos lo poco que tiene.

Teodoro continúa justificando sus acciones, pero ahora le corresponde enfrentar su futuro, el destino que les espera a los avaros: una fría y desolada muerte. Ve entonces su casa abandonada, siente las burlas de sus amigos comerciantes y lo más espantoso: su propia tumba. El horror que le produce esta imagen conmueve en lo más profundo a Teodoro que suplica una nueva oportunidad para cambiar. Entonces despierta de su pesadilla y se transforma en un hombre generoso y amable, que celebra la Navidad y ayuda a quienes le rodean.

116 visualizaciones0 comentarios
bottom of page