
Penderecki, su "Credo" y el asombro incandescente
ALGUIEN SIN FE dijo alguna vez que, aunque carecía de ella, admiraba hasta el éxtasis lo que era capaz de crear el genio humano movido por esa fe para él desconocida. Esto suele ser muy común en la música, en especial en las obras corales, muchas de ellas capaces de conmover y asombrar de manera incandescente al más incrédulo, al más escéptico, al más ateo. Así es el Credo del maestro polaco Krzysztof Penderecki, obra con la que mañana sábado a las 8 p.m. se inaugura una nuev